23 dic 2012

Mis 30 de 2012 (Parte 1)

Que nadie me pregunte cómo, pero así como quien no quiere la cosa hemos llegado al final del año. Lo que significa que, por supuesto, es momento de ponernos a hacer listas como locos. Y por supuesto que yo no iba a ser menos, porque ya sabemos que me gusta hacer listas más que a un tonto un lápiz. Claro que, como una cosa es que me guste hacer listas y otra muy distinta que no sea la cosa más indecisa del mundo, elegir entre tanta serie (porque he decidido no incluir realities, aunque alguno desde luego que se colaría entre lo mejor del año) es algo complicado. Razón por la que he decidido hacer la madre de todas las listas, e ir directamente a por el top 30. Porque no quería dejarme a nadie fuera, y este era el único modo de conseguirlo. Así que vamos con la primera parte de la lista, es decir, los puestos del 21 al 30.

30. Bunheads
Es cierto que la serie tiene sus fallos, pero para mí fue de lo mejorcito de este verano, y el tipo de serie que necesitaba para sustituir a MIOBI y mi amor por Payson. Y es que algo que junta las series teen con el mundo del baile (con apariciones de gentecilla de sytycd como Ricky o Kent, eso sin contar a Jeanine, que se incorporará en el siguiente tramo de la temporada) no podía faltar en mi lista. Y eso sin añadirle que, in my opinion, tiene lo mejor de las Gilmore, pero sin resultar tan creepy (que sí, que me encantan las Gilmore, pero no me iréis a decir que Stars Hollow no era un sitio de lo más perturbador).

29. Chicago Fire
De los estrenos de este septiembre, este va a ser el único que se va a colar en mi top del año. La verdad es que no esperaba mucho más allá de entretenimiento mediocre por parte de esta serie, con eso me conformaba, pero al final me sorprendió para bien. Es cierto que no nos encontramos ante la mejor serie de la década, pero tiene ese algo que consigue que poco a poco vayas implicándote en la vida de los personajes. Además, tiene a Shay. Ya solo por eso tenía que incluirla.

28. Scandal
Como ya comenté aquí, Scandal es esa serie que sin yo esperármelo, me tiene cada semana deseando que salga un nuevo episodio, y es siempre de las que más ganas tengo de ver. Todo lo que en ella ocurre es tan WTF, tan excesivo, y toda la serie en sí es tan loca que me parece una verdadera genialidad. Juzgad todo lo que queráis, pero me lo paso estupendamente con ella, así que yo diría que con lo que llevamos de segunda temporada se ha ganado de sobra su hueco en mi lista.

27. Weeds
Con sus cosas buenas y sus cosas malas (ejem, las mechas de Nancy, por ejemplo), esta octava temporada, que supuso además el adiós de la serie, me ha recordado por qué quería tanto a los Botwin, a todos y cada uno de ellos. Y me ha hecho darme cuenta de que, a pesar de todo, sí que ha merecido la pena seguir con ellos a través de todo. Also, la sonrisa de Nancy.

26. Parenthood
Parenthood habitualmente tiene un problema, al menos en lo que a mí respecta. Y el problema que tiene es que lo mismo que la hace tan grande, tiene la culpa de que habitualmente no entre en las listas de lo mejor del año, que me cueste recordar que está ahí. Todo lo que en ella ocurre se vuelve tan familiar, tan cercano, que al final del día nos olvidamos injustamente de que está ahí. Pero yo no me olvido, porque las discusiones a gritos de los Braverman, las lloreras que me pego con ellos, y todos los estados de ánimo por los que me hacen pasar hacen que sea una serie con la que disfruto muchísimo, y desde luego que es una de mis imprescindibles.

25. Revenge
Podemos decir lo que queramos acerca de cómo ha vuelto en su segunda temporada, pero lo cierto es que la que fue uno de los principales estrenos de la temporada pasada nos tuvo pendientes de la venganza de Emanda y las idas y venidas de los pijos de los Hamptons durante buena parte del año. E incluso ahora, cuando algunos empiezan a ponerle pegas, a mí me sigue atrapando prácticamente en todos sus capítulos. Incluso descontando todo aquello que tenga que ver con la trama del bar, que habitualmente suelo ignorarlo. Pero con lo demás por ahora me compensan.

24. Hit & Miss
La historia de Mia, que finalmente quedó en una miniserie (a pesar de que a mí y me parece a mí que a muchos otros nos habría encantado que siguiera) me enamoró y me atrapó de una manera que muy pocas series consiguen. Y es que hay algo en los temas habituales de Paul Abbott (ese modelo familiar tan poco habitual, tan roto y al mismo tiempo tan lleno de cariño es algo muy suyo) y en su forma de contar las historias con lo que siempre consigo conectar. Además, fue esta serie la que me descubrió a Karla Crome, que es la principal razón por la que le di una oportunidad a la nueva temporada de Misfits (lo que puede considerarse algo bueno, porque la temporada mejora enormemente respecto a la anterior).

23.Happy Endings
Los reajustes que ha ido haciendo desde que comenzó para mí le han ido añadiendo puntos, y al final la han convertido en una de las comedias con las que más me he reído a lo largo de este año. Y es que pocos personajes consiguen que me ría tanto como Brad y Jane, o como Alex desde que decidieron cambiarle la personalidad y volverla tonta perdida (y, por tanto, infinitamente más divertida). Claro que decir que ellos son con los que más me río no quiere decir nada malo de los otros tres, que también tienen sus momentos. Vamos, que en conjunto son un grupo muy divertido, y por eso los adoro y consiguen que me ría prácticamente en todos sus episodios.

22. Nurse Jackie
Quién me iba a decir a mí que después de lo floja que había sido su tercera temporada, Nurse Jackie iba a acabar colándose entre lo mejor del año con una temporada estupenda. Por fin Jackie fue la que nos habían prometido que sería, y nos regaló la que probablemente sea su mejor temporada hasta la fecha. Una temporada donde todos y cada uno de los personajes (incluidos los nuevos, uno de ellos interpretado por Bobby Cannavale, que ha tenido un año de lo más apañado) estaban por fin en el lugar en el que debían estar, aportando todo lo que podían.

21. Shameless (USA)
Y llegamos al final de la primera parte de mi lista interminable de lo mejor del año con una serie que, si la lista la hubiera elaborado hace unos meses, probablemente habría estado más arriba. Y es que soy perfectamente consciente de lo perfecta que fue su segunda temporada, y de lo mucho que me gustó. Pero, claro, al haber acabado hace bastante, al final la memoria, y las series que he ido viendo por el camino, hace que tenga que bajar unos puestos. Pero bueno, como digo, una temporada maravillosa, llena de drama y que a mí me hizo sufrir mucho. Y otra cosa no, pero a mí una serie que me haga sufrir me tiene ganada para siempre.

En realidad, lo que digo que me pasa con Shameless puede pasarme con muchas otras. Y también puede ocurrir que el orden en que las he puesto hoy vaya a cambiar completamente si me lo preguntan mañana. Pero bueno, por eso mismo he dejado bien apuntadito cuál es el orden en que las pongo a todas, para poder seguir mañana con mi segunda parte del ranking. 

¡Saludos!

PD: Cuando termine con la lista de lo mejor del año, a ver si saco tiempo para escribir sobre el mini-maratón british que me estoy pegando. De momento han caído Secret State y The Fear, y ayer empecé con Some Girls. Y, bueno, malo, mejor o peor, algo tengo que decir sobre todas ellas.
PD2: Y me he dado cuenta de que ha acabado Gossip Girl y tampoco he escrito nada sobre ello. Y no puede ser, claro que no.

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